| Víctor Ancalaf condenado a 5 años de prisión CORTE SUPREMA RATIFICA CONDENA DE LIDER MAPUCHE por Paula Huenchulaf :: 26 sept.2002 |
A
5 años y un día de presidio fue condenado el dirigente mapuche de Collipulli
y ex vocero de la Coordinadora Arauco-Malleco, Víctor Ancalaf, según se
desprende del reciente falló emitido por la Corte Suprema y que -ante una
apelación presentada por sus abogados en la capital- ratifica la condena
en primera instancia emitida por la Corte de Apelaciones de Temuco. La información fue proporcionada a los medios de comunicación por el abogado Miguel Soto, quien recordó que Ancalaf se vio involucrado en diversos "hechos de violencia" que afectaron el patrimonio de la empresa Forestal Mininco en la zona de Malleco, la que tras una serie de querellas criminales logró la condena definitiva del destacado dirigente.
"El proceso se encuentra en estos momentos en etapa de notificación y detención del inculpado, quien debería ingresar a un centro penal para cumplir los 5 años y un día de condena, según lo indica el fallo resolutivo de la Corte Suprema", declaró el abogado.
Larga trayectoria
Víctor Ancalaf saltó a la figuración pública a fines del año 1998, cuando increpó duramente al entonces Presidente Eduardo Freí en una visita que el mandatario realizó a la sureña localidad de Mininco, comuna de Collipulli. En dicha ocasión y en momentos en que el presidente Frei leía su discurso ante la multitud reunida en la plaza de armas, un grupo aproximado de 15 mapuches se tomó el estrado, boicoteando el acto con consignas alusivas a la recuperación de sus tierras.
"Frei, no se te olvide que estas en territorio mapuche", le gritó Ancalaf al primer mandatario cuando este abandonaba raudo el lugar, protegido por su todavía sorprendida escolta de seguridad.
Meses más tarde, Ancalaf y José Huenchunao, junto a destacados lonkos de Traiguén, Lumaco, Tirúa, Arauko y Cañete, conformarían la Coordinadora Arauko-Malleko, organización mapuche de corte radical y autonomista, y que desde su aparición pública tras la toma del fundo Santa Rosa de Colpi en Traiguén, en enero de 1999, fue catalogada por autoridades de gobierno como un verdadero "peligro" para la seguridad interior del Estado.
Durante el transcurso del año 1999, Ancalaf se desempeñó junto a Huenchunao como werken oficial de dicha organización, participando activamente de las continuas movilizaciones y recuperaciones de tierras impulsadas en distintos puntos de la zona sur del país por dicho referente, siendo detenido y encarcelado por la justicia chilena en varias oportunidades.
A comienzos del año 2001, sin embargo, Ancalaf junto a varias comunidades en conflicto de la Provincia de Malleco abandonaron las filas de la Coordinadora debido a diferencias políticas con sus pares de la Provincia de Arauco, principalmente en lo referido al diálogo con las autoridades de gobierno. Mientras para el sector liderado por Huenchunao el diálogo con el gobierno era un asunto rechazado completamente, Ancalaf proponía aceptarlo allí donde las posibilidades de recuperar los predios en conflicto por vías institucionales fueran concretas.
Es así como a partir de esa fecha, Ancalaf junto a los dirigentes de la zona de Collipulli iniciaron un proceso de negociación con la entonces Ministra de Mideplan, Alejandra Krauss, logrando a comienzos del presente año un histórico acuerdo con el gobierno que involucra la devolución de más de 3.000 hectáreas de tierras usurpadas por forestales y latifundistas a las comunidades en conflicto de dicho sector.
Entre los predios contemplados en el acuerdo, figuraban los fundos Rucañanco y San Jorge de Forestal Mininco, además de los fundos Granaderos, Pemulemu y Ginebra, propiedad de particulares. Estos últimos, ya entregados por la Conadi a los miembros de las comunidades Katrio Ñancul y Juan Aylla Varela, respectivamente.
Operativo policial
Si bien fuentes judiciales declinaron entregar antecedentes respecto del operativo policial que se destinará en su notificación y posterior arresto, en ámbitos policiales se reconoció la complejidad del caso, especialmente por la dificultad que presentarían al arresto del dirigente las propias comunidades de Collipulli, una zona en conflicto catalogada como de "alto riesgo".
Sin embargo, se informó que se iban a tomar todas aquellas medidas "especiales" necesarias, considerando la importancia de Ancalaf al interior del movimiento mapuche y sus antecedentes de reiterada evasión de la justicia.
Cabe recordar que el año 1999, tras ser requerido por los tribunales por infracción a la Ley de Seguridad del Estado, el dirigente se declaró en la "clandestinidad", burlando completamente la acción de la justicia bajo el manto de protección que le brindaron las comunidades.
Posteriormente, en marzo del año 2000, el dirigente fue finalmente detenido tras la toma del Juzgado de Collipulli. En la acción liderada por el propio Ancalaf, alrededor de 30 comuneros mapuches se tomaron las dependencias judiciales y en donde -según la policía- mantuvieron retenido al ministro de la Corte de Apelaciones de Temuco, Lenin Lillo, en protesta por la situación que aquejaba a numerosos presos políticos vinculados a su organización.
Después de permanecer más de 5 meses recluido en la Cárcel de Temuco, tanto Ancalaf como el resto de los manifestantes recuperaron su libertad, siendo la mayoría de ellos sometidos a proceso por desacato a la autoridad y secuestro, cargo este último por el cual acaba de ser condenado a 5 años de prisión.
Kolectivo Mapuche Lientur
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